El título de este cuaderno junta dos palabras, democracia y cultura, que se apoyan mutuamente como caminantes extenuados en mitad del camino. El cansancio de la primera palabra se debe a que designa una realidad desfigurada, erosionada en sus cimientos por la globalización económica, el poder de las grandes empresas, la tecno-política y el populismo. La segunda, porque ha perdido fuelle crítico y utópico al pasar de ser un noble ideal y un antídoto contra el poder a ser su vasalla.